Este
viernes los corredores se enfrentan a 205,5 kilómetros que van desde Montpellier
a Albi. Con el paso de los días el tour se pone más intenso y se acercan los Pirineos.
Esta
etapa es ideal para los “escarabajos”, pues desde el kilómetro 63 la montaña es
la constante. Una vez escalen el Faugéres y los Trece vientos, tendrán que
levantarse sobre los pedales para hacerle frente al pico de la Croix de Mounis, de 809
metros de altura. Para coronarlo, subirán 6,7 kilómetros. Luego vendrán 24,5
kilómetros para recuperarse. En el kilómetro 119 empieza el descenso y en el
kilómetro 142 se retoma la subida, esta vez de la cota de la Quintaine (de 739
metros).
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